En los últimos años España ha vivido periodos de gran sequía y altas temperaturas, haciendo que en algunas zonas del país, haya sido muy complicado conciliar la vida habitual con el termómetro. Ante la gran oferta y demanda de viviendas de alquiler, son muchas las personas que en estas fechas se preguntan, si puedo exigirle a mi arrendador que instale un sistema de aire acondicionado en mi casa o si como arrendador estoy obligado a satisfacer la petición del inquilino.
Reparación del aire acondicionado en viviendas de alquiler
La respuesta está condicionada por el contrato de alquiler que tengan ambas partes y por el estado inicial de la vivienda que ha sido alquilada. Si la vivienda tenía instalación de aire acondicionado en el momento en el que se hizo el contrato y se ha estropeado ¿Quién se hace cargo? Cuando las reparaciones que requiere la vivienda a modo de mantenimiento son pequeñas o estas se requieren debido al mal uso del inquilino, la ley establece que deberá ser este el que corra con los gastos de la reparación. Sin embargo será el propietario el responsable de mantener la vivienda en las condiciones óptimas para su uso, tal y como ha sido establecido por el contrato que en el momento inicial firmaron ambas partes.
Instalación de aire acondicionado a cargo del inquilino
En el caso de aquellas viviendas que no disponen de aire acondicionado en la vivienda de alquiler, sus inquilinos pueden solicitar al propietario la instalación de un sistema apropiado para la vivienda. Sin embargo el propietario no está obligado a satisfacer dicha petición. ¿Podría el inquilino hacer la instalación asumiendo él los costes? La respuesta es sí, siempre y cuando el propietario así lo autorice y el sistema elegido se adecúe a la vivienda, no comprometa la seguridad de la vivienda, ni la finca en la que se encuentra y respete las normas establecidas en el caso de no ser una vivienda independiente.
Instalaciones sin permiso del propietario
En algunas ocasiones se realizan instalaciones o pequeñas actualizaciones de la vivienda sin contar con el permiso del propietario. En estos casos el inquilino debe ser consciente de que estas deben ser fácilmente reversibles, es decir, que una vez finalice el contrato de arrendamiento el propietario pueda recuperar su vivienda en el estado original en el que la dejó.
Acuerdos con el casero
Con el fin de evitar problemas con el casero, la recomendación siempre es mantener una relación de armonía entre las partes, y en el caso de querer realizar modificaciones, pequeñas reformas, instalaciones como la del aire acondicionado… se aconseja contar con un permiso por escrito del propietario. Con él, no será necesario devolver la vivienda en el momento en el que finalice el contrato a su formato de origen.
Consejo legal para los contratos de arrendamiento
Los contratos de arrendamiento son una pieza clave para establecer las bases de la relación posterior entre el inquilino y el arrendador. Por este motivo se recomienda contar con el consejo legal de un abogado que guiará el proceso, ayudará a establecer límites y cláusulas para el buen funcionamiento de la relación y el mantenimiento de la vivienda.